El próximo 17 de diciembre, la Catedral de la Almudena acogerá la beatificación del palentino, Vicente Blanco, oblato y natural de Frómista, junto con la de otros 21 oblatos y un seglar. Estas personas, mártires, fueron asesinadas en 1936 por vivir su fe y no renunciar a su amor a Cristo.
Vicente nació en Frómista el 5 de abril de 1882 y en 1895 ingresó en el seminario menor de los Oblatos en la provincia de Santander. Más tarde es enviado a Francia para comenzar el Noviciado y allí mismo hizo los primeros votos. Los estudios eclesiásticos los realiza en Roma donde fue ordenado sacerdote el 14 de abril de 1906. Los que conocieron al P. Vicente destacan de él su generosidad, sencillez y su gran amor a la familia religiosa. El P. Vicente Blanco es para muchos un gran desconocido. El pueblo de Frómista y la provincia de Palencia, en general, tienen que sentirse orgullosos de que uno de sus hijos sea beatificado y reconocida su entrega por amor a Dios y a su Iglesia. Reproducimos aquí el testimonio de un Oblato: “No era un religioso vulgar, sino un varón de gran virtud. Se distinguía por su observancia religiosa, que era estímulo para toda la comunidad y le llamaban el Santo Padre Blanco”.
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