martes, 17 de noviembre de 2015

«¡Ve y predica!»

El pasado 7 de noviembre se celebró la apertura del Año Jubilar Dominicano, con el que se conmemora los 800 años de la confirmación de la Orden. Así, el Monasterio de Nuestra Señora de la Piedad albergó el acto en el que se leyó el mensaje del Maestro de la Orden y se encedió un gran cirio que permanecerá encendido todo el Año Jubilar. De esta luz se prendieron ocho cirios más pequeños representando a las cofradías de la Vera Cruz, el Rosario y Fátima, al grupo de jóvenes y a los dominicos seglares, a los tres conventos dominicos de nuestra ciudad (San Pablo, la Piedad y Misioneras de Santo Domingo) y las velas repartidas entre los fieles.

Posteriormente, se procesionó una imagen de Santo Domingo de Guzmán hasta la Iglesia conventual de San Pablo. Allí se celebró donde la Solemne Eucaristía del apertura de Año Jubilar Dominicano, que fue presidida por el administrador diocesano, Antonio Gómez Cantero.

Antonio Gómez Cantero, reordó que en estos 800 años «ha habido y hay mucha vida evangélica, mucha fraternidad y muchos desvelos por la predicación y misión evangelizadora, pues Domingo no optó por la cruzada, tan de moda entonces, sino por la predicación para la conversión del corazón».
El administrador diocesano finalizó la homilía invitando a la familia dominicana a ser para «todos nosotros, que también lo necesitamos, ejemplo de una vida común de oración y estudio; de pobreza evangélica para dar respuesta a la misión evangelizadora; ¡comunicadnos y animarnos a contemplar con vosotros el misterio de Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo! En nombre de nuestra y vuestra diócesis: ¡Feliz y Santo Jubileo!».

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