- Éx 17, 3-7 Danos agua que beber
- Sal 94 Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor: «No endurezcáis vuestro corazón»
- Rom 5, 1-2. 5-8 El amor ha sido derramado en nosotros por el Espíritu que se nos ha dado
- Jn 4, 5-42 Un surtidor de agua que salta hasta la vida eterna
En la primera lectura, el pueblo de Israel en el desierto pide agua para beber y Moisés la hace brotar de una roca. Se anuncia así el agua que brotará del costado de Cristo abierto por la lanza del soldado: quien la beba, por la fe en Cristo y por el bautismo «se convertirá dentro de él en un surtidor de agua que salta hasta la vida eterna» (Ev). Esa agua significa el amor de Dios derramado en nuestros corazones con el Espíritu Santo que se nos ha dado; amor que llevó a Cristo a morir por nosotros, pecadores (2 Lect).
No hay comentarios:
Publicar un comentario