Celebramos el 16 de septiembre la fiesta de estos dos santos mártires, que muy unidos se ayudaron para vivir, testimoniar y defender la fe como mártires del siglo III. Cornelio como pastor de la Iglesia universal, y Cipriano como obispo de Cartago... lucharon contra el cisma de presbítero y antipapa Novaciano, que no admitía la elección de Cornelio y defendía una Iglesia sólo de “puros”, negando la absolución y el perdón a los que hubiesen renegado de la fe. Los dos alcanzaron el martirio, durante las persecuciones de los emperador Gallo y Valeriano. San Cipriano nos dejo preciosas cartas dirigidas a San Cornelio donde le anima, le apoya y defiende la unicidad, catolicidad, y fidelidad de la Iglesia.
Siempre se les representa juntos. Cornelio con sus atributos de Papa, tiara, cruz patriarcal; y Cipriano, con mitra y báculo. En las parroquias de las que son titulares los están colocados en la calle central del retablo, como ocurre en San Cebrián de Campos, San Cebrián de Muda y Abastillas. La parroquia de Pedraza está sólo dedicada a San Cipriano.
Retablo mayor de la iglesia de San Cornelio y San Cipriano, de San Cebrián de Campos. Esculturas de bulto redondo, en madera policromada, de Juan de Valmaseda, realizadas entre 1540 y 1548.
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