San Gregorio Ostiense. Talla barroca en madera policromada. Autor anónimo. Segunda mitad del S. XVIII. Ermita que el santo tiene dedicada en Villaumbrales.
Nacido en Italia, se educó en el monasterio benedictino de San Cosme y San Damian de Roma, del que fue abad. Juan XVIII lo nombró obispo de Ostia (puerto de Roma) y nombrado Cardenal es enviado como legado papal de Benedicto IX a las cortes de Burgos y de Pamplona, para ejercer como mediador en conflictos.
Predicó en Navarra y La Rioja la necesidad de conversión y penitencia, acompañando su palabra con el ejemplo de vida. Al encontrarse con Santo Domingo de la Calzada, su vida cambia radicalmente y toda su preocupación fue ser santo, “hacer el camino” hacia la auténtica felicidad que es Cristo. Ambos llegaron a la santidad, ayudando a pobres y peregrinos, y realizando signos prodigiosos. Se cuenta, que en una ocasión libró los campos riojanos de la plaga de langosta y los agricultores le invocaban como santo patrón y protector de los campos contra los insectos y el pulgón.
Su cuerpo se venera en la Basílica que lleva su nombre sobre una colina próxima al pueblo de Sorlana. Su devoción está muy extendida por todo el Camino de Santiago. En la diócesis de Palencia dos poblaciones las que le tienen como santo Patrón, Baltanás y Villaumbrales. Su fiesta se celebra el 9 de mayo.
Oración
San Gregorio Ostiense. Te pedimos que nos libres de la plaga del egoísmo, del materialismo y relativismo que hoy tanto nos ataca y nos enseñes el camino de la auténtica conversión y penitencia para recorrer la senda de la vida e intentar resolver todos los conflictos con los que nos encontremos de forma dialogada y pacífica. Amén.
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