Las Reliquias

El Diccionario de la Lengua Española define la palabra “reliquia” como “Parte del cuerpo o de la vestimenta de un santo que se venera como objeto de culto”. Y añade: “Entre los tesoros de iglesias y monasterios abundan los objetos preciosos destinados a contener reliquias”. Y el canon 1190 del Código del Derecho Canónico, afirma: “Está terminantemente prohibido vender reliquias sagradas. Las reliquias insignes, así como aquellas otras que gozan de gran veneración del pueblo, no pueden en modo alguno enajenarse válidamente...”.

Muchos cristianos -y otros que se llaman agnósticos- tenemos reliquias de Tierra Santa o de algún Santuario de mucha devoción. Podemos tener también alguna reliquia del santo o la santa de nuestra devoción que nos sirven para recordar su vida. Nos animan a imitarles. Son un aviso para que recemos a nuestros santos y les pidamos ayuda en las dificultades.

En la JMJ de Madrid el Papa celebró una Eucaristía en la Catedral de Madrid acompañado de los seminaristas. El Altar lo presidía una Cruz y en una mesa, a un lado, estaban las Reliquias de San Juan de Ávila, llevadas desde Montilla donde descansa el patrono del Clero español.

Tras la Eucaristía, las Reliquias se llevaron al Carmelo de las Carmelitas Descalzas de Aldehuela (Madrid), donde está enterrada la santa Madre Maravillas de Jesús... Dos días tuvieron las Reliquias en el convento.

¿Por qué escogieron este convento? Muy sencillo... la Santa Madre Maravillas de Jesús, tenía una devoción extraordinaria a San Juan de Ávila. Y así lo manifestó en sus Cartas y aconsejó que se leyeran los escritos del santo. Ella misma mandó a una religiosa del convento, que hiciese una selección de los escritos de San Juan de Ávila para facilitar su lectura. Y así escribió en una carta: “Queremos consolar a nuestro Cristo y que quede contento de cuentos trabajos pasó por nosotras. No saben que cosas más preciosas hay en el libro del Beato Juan de Ávila, donde trata de la Pasión y Sangre del Señor”.

Germán García Ferreras