Del 18 al 25 de enero vamos a celebrar la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos. Hoy Dios exige que todos los cristianos caminemos unidos por la senda de la justicia, la compasión y la humildad. Sabiendo que la paz y la unidad son plenas cuando se fundamentan en la justicia.
Durante estos ocho días -y a lo largo de toda nuestra vida- se nos propone caminar... de la siguiente manera:
- 18 de enero - Caminar en conversación (Lc 24, 13-25). Reflexionamos sobre la importancia del diálogo y de la conversación como un medio para superar obstáculos. Tanto para el ecumenismo, como para las luchas por la liberación de las personas en todo el mundo, la capacidad de hablar y de escuchar son fundamentales. En este tipo de conversación auténtica podemos llegar a reconocer a Cristo con más claridad.
- 19 de enero - Caminar con el cuerpo partido de Cristo (Lc 22, 14-23). Al reconocer la solidaridad entre Cristo crucificado y los “pueblos partidos” del mundo, intentamos juntos como cristianos aprender a compartir entre nosotros esta solidaridad de una manera más profunda. Se pone de manifiesto, sobre todo, la relación entre eucaristía y justicia y se invita a los cristianos a descubrir modos concretos de un vivir eucarístico en el mundo.
- 20 de enero - Caminar hacia la libertad (Jn 4, 4-26). Se nos invita a celebrar los esfuerzos de comunidades oprimidas en todo el mundo, cuando protestan contra todo aquello que esclaviza a los seres humanos. Nosotros, cristianos comprometidos con una mayor unidad, aprendemos que la eliminación de todo lo que separa a las personas es esencial para alcanzar la vida en abundancia, la libertad en el Espíritu.
- 21 de enero - Caminar como hijos de la tierra (Jn 9, 1-11). Tomar conciencia de nuestro lugar en la creación de Dios nos une los unos a los otros, porque nos hace ver nuestra interdependencia, entre nosotros y con la tierra. Teniendo en cuenta la urgencia del cuidado del medioambiente y de una correcta y justa repartición de los frutos de la tierra, los cristianos están llamados a unas vidas de testimonio activo en el espíritu del año jubilar.
-22 de enero - Caminar como amigos de Jesús (Jn 15, 12-17). Reflexionamos sobre las imágenes bíblicas de la amistad y el amor humano como modelos del amor de Dios hacia cada ser humano. Vernos como amigos muy amados de Dios tiene consecuencias para nuestras relaciones dentro de la comunidad de Jesús. Dentro de la Iglesia, toda barrera de exclusión es incompatible con una comunidad donde todos son por igual los amigos muy amados de Jesús.
- 23 de enero - Caminar más allá de las barreras (Mt 15, 21-28). Caminar con Dios significa caminar más allá de las barreras que dividen y perjudican a los hijos de Dios. Las lecturas bíblicas de este día miran a distintos modos de superar las barreras humanas y culminan con la enseñanza de san Pablo: «Incorporados a Cristo por el bautismo os habéis revestido de Cristo. Ya no hay distinción entre judío y no judío, ni entre esclavo y libre, ni entre varón y mujer. En Cristo Jesús, todos sois uno» (Gál 3, 27-28).