Se acabaron las Ferias y Fiestas de San Antolín. No hay mejor manera de empezar un nuevo curso que honrando la memoria del Santo Patrón de la diócesis y de la capital. Ahora toca hacer vida lo que nos reclamaba el Papa Francisco en la JMJ de Río de Janeiro, cuando decía: «Quiero lío en las diócesis, quiero que se salga afuera… Quiero que la Iglesia salga a la calle, quiero que nos defendamos de todo lo que sea mundanidad, de lo que sea instalación, de lo que sea comodidad, de lo que sea clericalismo, de lo que sea estar encerrados en nosotros mismos».
Y pensando en el “lío” y en los finalizados “sanantolines”... me vienen a la cabeza frases de un par de pregones que hemos escuchado estos días. Y curiosamente David -como el del Cantar de los Cantares- ha sido el nombre de los dos pregoneros a los que me voy a referir.
David Frechilla, periodista de Onda Cero Palencia -y buen amigo- utilizó y reutilizó la siguiente frase en la inauguración de Expo Aire: «Solo no puedes... con amigos sí», advirtiendo que en esta vida no tenemos que arrepentirnos de lo que no hemos hecho... sino de lo que no hemos intentado. Y soñó con una pléyade de artistas que renovara Palencia: «He pensado que quizás con amigos sí podemos lograr que el próximo Guernica que se pinte nos muestre una Palencia bombardeada por ideas, proyectos e ilusiones. He pensado que quizás con amigos podamos escribir un Quijote donde seamos capaces de vencer a molinos con forma de desánimo y derrotismo. Porque viendo a mis sobrinos y recordando a muchos amigos que tengo fuera ojala entre todos hiciéramos una versión de la canción de Juanito Valderrama donde en lugar del emigrante habláramos de inmigrantes que acuden a Palencia sabedores de que están en tierra de oportunidades. Que si se tiene que pintar una nueva Gioconda, nos muestre una mujer palentina cuya sonrisa revele la lucha histórica y el orgullo de las féminas palentinas por el terruño que ve nacer y vivir a sus hijos. Que los próximos fusilamientos que pinte Goya sean los que los palentinos realizamos al paro, el desánimo o la falta de oportunidades».
Yo me apunto -y ya lo sabe él- a la Palencia de David Frechilla. Y bien pensado... todos podemos convertirnos en artistas... si nos esforzamos y esforzamos en buscar la excelencia y el buen hacer en lo que hagamos a diario. Cada uno en lo suyo. Porque un mecánico, un pastelero, una funcionaria, un maestro escuela... que hace bien y con mimo su trabajo... es un artista. Y con el aporte de muchos “artistas” tiramos para adelante... sí o sí.
Y porque “solos” no podemos. Ni vamos a poder. Pero “con amigos”... seguro que sí. Y “amigos”... aquí significa TODOS. Los que piensan como yo y los que no piensan como yo. Los que creen en el Dios que yo creo... y los que no creen. Los de un lado y los de otro. Los proyectos son de todos. Las ilusiones son de todos. El futuro es de todos. Y no podemos desperdiciar ninguna mano. Necesitamos esa ciudad -ese mundo- ilusionante. Y nos tenemos que poner a ello, porque no se va a crear por generación espontánea.
Segundo pregón. El del Palentino Ausente. David Rodríguez. Un joven escultor de fama internacional que vive a caballo entre New York y Madrid. Tras decir que «Mi familia es uno de los ejes esenciales de mi existencia» añadió: «Virtudes tales como la honradez, la sinceridad, el trabajo, el compromiso o el respeto por el resto de los ciudadanos entraron en mí de la mano de mis padres, de forma muy especial de la de mi madre». No hacen falta muchas explicaciones a estas palabras. Las madres, los padres, los abuelos, tíos y demás familia... la sociedad entera tiene, tenemos, mucha faena.
Finalizo. Desde el respeto, el trabajo, la honradez... seamos artistas. Construyamos algo grande. Merecerá la pena.
Domingo Pérez
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